Debo ir a un paso que me permita llevar a los estudiantes a través del proceso de aprendizaje de manera uniforme. Ni muy lento que los avanzados se aburran ni muy rápido que los menos avanzados se me frustren. Ni muy fácil que los avanzados se molesten al ver que no tienen progreso ni muy difícil que los menos avanzados estén tropezando a cada rato.
La enseñanza y la educación es un acto de balance.