Una escuela se convierte en Charter. Le llegan unos fondos y se le permiten unas cosas que a otras escuelas no. Algunas escuelas Charter funcionan y otras no. No hay nada de diferente entre una Charter y una escuela pública, ¿o sí? A las escuelas Charters que salen bien se les otorgan unos incentivos mayores a los de las escuelas regulares que les permiten entre otras cosas hacer promoción. Allá en los EEUU se ven anuncios en lugares públicos donde escuelas Charters anuncian los ofrecimientos que tienen y atraen de esa manera más matrícula. Las escuelas circundantes al ver reducidas sus matrículas se ven forzadas a cerrar o a hacer propaganda para evitar ser cerradas.
Es lamentable como escuelas buenas tienen que competir y sacar tiempo para tener que promocionarse y evitar ser cerradas. Esto afecta directamente la calidad de la enseñanza al tener que dedicar parte del tiempo lectivo a propaganda. Y todo porque ahora al "semi privatizar" escuelas la competencia obliga a las demás a sobrevivir. Ahora la educación se convierte en un producto de mercadeo. ¿Que están aprendendo nuestros estudiantes? Dios nos guarde de las Charters.
Fuente:
Pressed by Charters, Harlem Public Schools Turn to Marketing - NYTimes.com
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